Después de haber suspendido temporalmente la función de restablecer contraseña, Skype ha encontrado una solución definitiva al grave problema de seguridad y privacidad que afectó a sus usuarios.
Por largo tiempo ha sido posible para intrusos hacerse del control de una cuenta de Skype con un sencillo truco. Según se ha comprobado, se trató de un error de diseño propio de principiantes, sumado a un grave descuido con la privacidad de los usuarios. En efecto, la vulnerabilidad no sólo permitía ingresar a la cuenta de usuario, sino también tener acceso a todo su historial de chat y mensajería. Por añadidura, el usuario legítimo quedaba bloqueado de su propia cuenta, al desconocer la nueva contraseña.
La información fue difundida en agosto por un foro ruso de seguridad y comunicada a Skype, sin que la empresa haya reaccionado. Esto implica que los usuarios estuvieron expuestos durante más de dos meses.
El procedimiento implicaba únicamente crear una nueva cuenta de Skype proporcionando la dirección de e-mail asociada a la cuenta se deseaba intervenir. Posteriormente, se solicitaba restablecer la contraseña, que generaba un correo enviado a la cuenta del intruso. Esto se debe a que Skype permite crear varias cuentas con la misma dirección de correo electrónico. Pero al restablecer la contraseña, el enlace generado para restablecer la clave de la primera cuenta era enviada a la cuenta más reciente.
Según Skype, el servicio tiene actualmente 250 millones de usuarios. Recientemente, Microsoft anunció que su servicio Live Messenger será descontinuado y fusionado con Skype.
Skype asegura que sólo un número reducido se cuenta se vio afectado por la vulnerabilidad. Tales cuentas están cerradas, y sus usuarios legítimos pueden obtener acceso a ellas empleando un procedimiento de seguridad establecido por Skype. En concreto, se pide al usuario proporcionar su identificación en Skype, dirección de correo electrónico, país, eventuales métodos de pago asociados a la cuenta, y detalles sobre tres de sus contactos en Skype.