Usted está pensando en abrir una empresa, pero no tiene esa idea arrasadora ni sabe qué modelo de negocio es el mejor. ¿Por dónde comenzar? Para Marty Zwilling, mentor de startups, el primer paso es preguntar por qué usted quiere ser un emprendedor, y no un empleado. Existen varias respuestas y el especialista analiza algunas.
Veamos:
Acaba de ocurrírsele la tecnología que va a cambiar el mundo.
Si usted quiere desarrollar un proyecto, una startup tradicional es la mejor apuesta. Existe el desafío de conseguir las patentes, crear el producto propiamente dicho y definir de donde provendrá la receta.
Usted quiere ser el jefe.
Si quiere tener un negocio por la libertad que usted tendrá en la gestión de la empresa piense en adquirir una franquicia. La organización-base va a definir cuándo y cómo hacer casi todo pero todo el éxito depende de su ejecución.
Quiere ganar mucho dinero.
Las startups no ganan nada al comienzo. Algunas no ganan ni al final, sin embargo, unas pocas realmente consiguen facturar bastante. Las franquicias, en promedio, rinden menos que otros tipos de negocio, pero poseen probabilidades de éxito más altas. Las consultorías, por su lado, raramente lograr facturar a gran escala.
Quiere emprender para satisfacer a otra persona.
Existen muchos empresarios que están comenzando un negocio porque sus papas siempre esperaron que ellos asumiesen la conducción empresa familiar o porque el cónyuge está insistiendo en ello o por un hermano o colega. Si usted tiene la posibilidad de escoger, piense en una franquicia con poco riesgo.
Usted quiere algo para tener en qué ocuparse
Si tiene recursos para abrir una empresa, es uno de los pocos suertudos que puede comenzar o comprar el negocio que quiera. Si le falta experiencia, una franquicia puede ser lo ideal, porque usted obtendrá ayuda para estructurar las operaciones. Por otro lado, si usted tiene muchísima experiencia, ¿por qué no compartirla a los demás por medio de una consultoría?
De acuerdo con Zwilling, si aún no tiene certeza de cuál es el mejor negocio, vale la pena trabajar como empleado por un poco más de tiempo, ganar experiencia y autoconocimiento y juntar capital para emprenderla. Sólo después de ello dé el gran salto en uno de los modelos citados arriba. Luego sabrá si se está divirtiendo con ello y ese es el mejor criterio de todos.
Vía: Revista PEGN Globo