El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Gonzalo González informó que estaría en vías de solucionarse el problema que se suscitó el miércoles con el ingreso de diez camiones que transportaban una partida de 270 toneladas de manteca de Conaprole al territorio chileno, por un monto de U$S 250.000.
Dicha exportación de manteca uruguaya fue detenida en la zona fronteriza de Osorno, a unos 1.000 kilómetros de Santiago de Chile, por un grupo de productores y autoridades del país trasandino, los primeros en una actitud proteccionista y las segundas argumentando que no cumplía con determinadas exigencias sanitarias.
González informó ayer, al término de su acuerdo con el presidente de la República, que la razón esgrimida para impedir el ingreso a Chile de ese cargamento de manteca fue que la documentación que llevaban los transportistas no especificaba que se hubiera cumplido con la doble pasteurización de la leche para la elaboración del producto, exigencia que pone ese país para permitir su comercialización en su mercado.