Algunas decisiones nos acompañaran por siempre, como elegir a tu pareja, a tus amistades, incluso salirte de tu casa para vivir solo. Una de las más importantes y que no debes pasar por alto es: elegir en que negocio quieres emprender.
Es común escuchar muchas coas cuando te encuentras tomando esta decisión, por ejemplo: “¿Ahí vas a ganar dinero?”, “Los que emprenden en tipo de negocio, si tienen resultados”, ”Eso solo hará que pierdas tu tiempo” y la lista de frases de este tipo es interminable, pero son argumentos que nos alejan de lo que en verdad importa.
Es cierto que el negocio en el que emprendamos nos “dará ganancias”, pero no es lo único; se trata de formar un estilo de vida, que nos haga sentir bien, no solo por el dinero, sino porque hacemos algo que disfrutemos.
Elegir nuestro negocio a emprender significa pulir nuestras pasiones, potencializar nuestras competencias y acercarnos un paso más, a ese nivel que tantos deseamos. Si te decides en hacer lo que te gusta, te hará sentir bien, útil y sobre todo, feliz; en cambio, si emprendes en algo que es adecuado para ti, harás las coas de manera forzada, a disgusto y probablemente acabaras desertando o quejándote siempre de tu decisión.
La decisión de tu negocio
Es por eso que esta elección no debe ser una decisión tomada a la ligera. Existen muchos factores que debes considerar para este importante momento; pero hay 4 en especial, a los que tienes que poner atención:
1. Identifica lo que te apasiona. Hacer bien las cosas y con energía, te permitirá disfrutar lo que emprendas. Si no estás seguro de lo que te gusta, te recomendamos que realices un test de aptitud personal, te servirá como una guía.
2. Busca información. No hay mejor fuente que la experiencia, una buena forma de hacerlo, es platicando con los expertos, gente que se dedique a lo que a ti te interesa. Puedes preguntarle como empezaron, como llegaron hasta ahí, que es lo que más les ha gustado o todo lo que quieras saber sobre el tema.
3. Escucha a la competencia. Ten presente que lo más importante de un negocio, no es lo que te ofrecen al principio, sino lo que pueden prometerte para lo largo del tiempo que exista una relación. No te dejes llevar por regalos o promesas. Toma en cuenta todas las oportunidades que la vida brinda para entrenarte en el campo de los negocios reales, como platicas de emprendimiento, capacitación, programas de apoyo, etc.
4. Adiós a los prejuicios. Una frase que te puede ayudar es: “Mamá, Papá, conciencia (o el que apliques)… lo siento, sé que quieres verme de bata blanca o en una oficina con un sueldo seguro, pero mi verdadera pasión es _____________________ (termina la frase)”. Olvida las barreras de: “eso no te hará ganar bien”, “te vas a morir de hambre”, “todos en la familia hemos sido abogados”, “eso que quieres está muy difícil”, etc. Apréndetelo, gana más el que hace las cosas por convicción, no por obligación.
Te invito a seguir estos sencillos consejos antes de iniciar un negocio, te será de mucha utilidad para tomar una decisión más acertada.
Una vez que hayas encontrado el negocio que tanto te gusta, el que esta “hecho a tu medida”, tómalo y no lo sueltes, recuerda que será el eslabón que te ayudara a construir tu vida ideal.
Vía: emprendices.co