Medios de prensa del Uruguay recogen declaraciones del Ministro de Economía uruguayo, Alberto Bensión, en las que traza un panorama «preocupante» de la situación del Uruguay y subraya que si no se aprueba el nuevo paquete fiscal que promueve el Poder Ejecutivo, el Producto Bruto Interno (PBI) puede caer hasta un 5% (PBI total uruguayo 20.000 millones u$s).
Bensión dijo que hubo errores de cálculo en las previsiones realizadas para elaborar el ajuste aprobado en febrero pasado. Manifestó que esa falla se produjo a causa del agravamiento de la situación en Argentina, que golpea directamente la economía uruguaya.
El titular de Economía afirmó que con los nuevos impuestos que comenzaron a regir en marzo se recaudó menos de lo previsto.
Expresó que es necesario seguir el programa acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que prevé un déficit a diciembre de 2,5% «si no se aprueba el ajuste esa meta es inalcanzable» afirmó.
Con relación a la reducción de gastos expresó que la Administración Central logró hacerlo en un 8,5%. Asimismo, subrayó la necesidad de que los socios de la coalición (Partido Nacional), aprueben el paquete de medidas, en este mes, por el cual se aspira a recaudar u$s 230 millones anuales. Las medidas contenidas en el paquete fiscal son: Aumento del Impuesto a las Retribuciones Personales de trabajadores públicos, privados y jubilados, Aplicación del IVA al agua y transporte de pasajeros, Aumento en las tasas del Impuesto a las Rentas de la Industria y Comercio y a las Rentas Agropecuarias, y el Impuesto a las Comisiones.
Por último, cabe señalar que la calificadora de riesgo STANDARD & POOR’S volvió a bajar la nota de la deuda pública uruguaya luego de haberla reducido ya el 14 de febrero pasado, lo que implicó la pérdida del grado inversor. La agencia explicó que la «inflexibilidad de la política monetaria y el persistente déficit fiscal, profundizado por la crisis argentina» representan importantes desafíos para el gobierno. La calificadora destacó además la pérdida de depósitos con el consecuente impacto negativo sobre el sistema financiero.»