Colombia, el tercer mayor productor mundial de café, dijo que la inclusión de los granos de Brasil en la cotización del contrato «C» de la Bolsa de Nueva York, llevaría a la ruina a millones de familias, pues se produciría un declive de los precios a los cuales se les paga a los exportadores.
De incluirse los cafés arábigos semilavados de Brasil en el contrato «C,» se podría presentar una inundación de grano de menor calidad en el mercado, lo que se traduciría en una caída de los precios de los de alta calidad, como los colombianos, dijo el presidente de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, Gabriel Silva.
«En el mediano plazo, esto llevará a una dramática reducción general de la calidad, afectando a los consumidores finales,» expresó Silva en un informe al Congreso Nacional Cafetero de Colombia, que concluyó en Bogotá.
«Podría constituirse en el factor de ruina para millones de familias cafeteras en el mundo,» expresó Silva.
Según informó Reuters, la reacción de los cafeteros colombianos, la mayoría viviendo en condiciones de extrema pobreza, se produce en momentos en que después de casi cinco años, los precios del grano colombiano superan la barrera del dólar por libra.
Actualmente, para la cotización del café en la Bolsa de Nueva York sólo están incluidos los cafés suaves como los producidos por Colombia, Kenia y Tanzania y los arábigos lavados cosechados en Centroamérica y México, a los cuales se les reconoce un sobreprecio por su calidad.