Descubre lo que esta tendencia les ha enseñado a los vendedores para conquistar a los millennials.
Como miembro de la Generación X, me he dado cuenta de que las selfies son casi cómicas. Es una fotografía tomada por ti, el protagonista eres tú y no haces nada más que ser tú mismo. Algunos han comenzado a llamar a los millennials “la generación selfie”. Pero, ¿qué nos dicen las selfies a los vendedores?
Yo creo que mucho, ya que en cada foto estas personas se expresan y revelan cómo prefieren recibir la información. Para los vendedores, saber cómo se comunican los millennials es clave para llegar a ellos y ayudarlos a expresarse a través de las marcas.
Te comparto la forma en la que la selfie nos da una visión de la psique de esta generación:
1. Selfies egoístas. A veces parece que cada situación, sin importar qué tan mundana sea, es “digna de una selfie” para algunos millennials. ¿Nueva playera? ¡Selfie! ¿Llegaste a la oficina a tiempo? ¡Selfie! ¿Te sientes bien hoy? ¡Selfie! Esta generación va más allá de lo digital, están en la cúspide de la era de los smartphones.
Cada aspecto de su vida está basado en la conectividad. Así que ¿por qué la habilidad de compartir cada momento de sus vidas es raro para algunos? Así es como aprenden sobre nuevos restaurantes y productos, de esa forma se quejan con sus amigos sobre su última relación y hablan de cómo conocieron a su (posible) futura pareja.
Lección aprendida: La conectividad es un aspecto integrado en la vida de los millennials. Los smartphones no pueden ser algo secundario, deben ser algo primario.
2. Selfies de autoexpresión. Los millennials no sólo comparten historias todos los días en las redes sociales, sino que también usan todo tipo de herramientas para mejorarlas. Tal vez usen algún filtro para esa fotografía o una pose única o hashtags. Sus fotos en las redes sociales son una expresión de ellos mismos así como de la ropa que llevan puesta, la música que escuchan y la gente con la que conviven.
Lección aprendida: Si quieres que esta generación te haga caso, dale la oportunidad de expresarse. Asegúrate de que tu servicio al cliente los escuche y les dé la oportunidad de personalizar sus productos.
3. Selfies situacionales. “¿Viste a este hombre? Se tomó una selfie hasta arriba del Cristo Redentor en Río de Janeiro”. Es una de las selfies más “arriesgadas” actualmente. Las vidas de los millennials a menudo tienen sus raíces en el contexto visual. Crecen en un mundo con fácil acceso a las fotografías (Instagram) y videos (YouTube). Hasta se gradúan de la preparatoria con la habilidad de crear presentaciones, sitios Web y editar videos. Saben el impacto visual que pueden tener y confían en las historias que comparten.
Lección aprendida: No necesitas depender de las copias para contar tu historia. El contexto visual no puede exagerarse con los millennials. Lo entienden. Una imagen o video poderoso puede llegar más lejos que una copia.
Autor: Kelly Bush