En el balance que se hace a esta altura del año aparecen los proyectos, las ideas, los viajes, los cambios de casa, de trabajo. También analizamos la posibilidad de comenzar con nuevos estudios o cursos que por distintos motivos quedaron postergados.
Es interesante pensar en todas las áreas que conforman una persona, en todas las dimensiones, para evaluar en cada una de ellas cómo estuvimos, cómo estamos y qué logros queremos alcanzar.
En la dimensión laboral, es interesante plantearse si queremos seguir en lo mismo trabajo o si el inicio de uno nuevo año es, tal vez, un buen momento para crecer y lanzarse, ya sea en un emprendimiento personal, en otra institución o en la misma en otro rol.
Para esto entra la dimensión autoestima, para sostener y hacer merecedor este movimiento. ¿Es un momento de empezar, retomar o cambiar si estamos estudiando? ¿Es eso lo que nos gusta? ¿Cómo nos vemos en unos años?
A nivel familia, podemos preguntarnos qué cambios podrían favorecer la buena comunicación para que cada encuentro pueda ser disfrutado a pleno. Es importante la negociación: cada integrante debe ceder en algo y aprender a consensuar la aceptación del otro como es (esencia) y no por sus conductas (dimensión social).
También es un momento oportuno para darnos un espacio para profundizar y conectarnos con nosotros mismos y cuidar nuestra salud aprendiendo a explotar lo mejor que tenemos.
Todas y cada una de las 9 dimensiones (autoestima, emocional, espiritual, salud, racional, social, comunicación, estética y laboral) son importantes para armonizar y poder, en conjunto, hacer realidad las metas que durante tiempo se han postergado.
En esta etapa del año donde se cierran muchas cuestiones es el momento de pensar en la apertura de nuevas puertas. El momento favorece a la iniciativa de reflexionar sobre lo hecho hasta el momento y darse la posibilidad de vivir a pleno, todos y cada día de nuestros días, teniendo en cuenta lo rápido que pasa el tiempo. Es hora de llevar a la acción nuestros deseos.
10 tips para comenzar con todo el 2016:
1- Tener un tiempo para reflexionar sobre vos misma profundamente.
2- Que la estrategia para elegir el lugar de vacaciones sea conversada y razonada junto a los que te acompañarán.
3- En el lugar que elijas vacacionar, es importante que puedas lucir deshinibidamente tu cuerpo, ser vos misma. Pensá que la actitud es lo que se ve además del cuerpo.
4- Tené en cuenta que ser la más linda y atractiva no te garantiza la felicidad ni el éxito.
5- Si tu peso no está como lo deseás, pensá qué cosas hacen que comas cuando no tenés ganas y de esta forma vas a poder mejorar tu autestima. Controlá la ansiedad.
6- Pensá en positivo para planear una meta corta a realizar en 2016.
7- Disfrutá de la vida, cuidate psicofísicamente pensando que es la única vida que tenemos y aprendé a vivirla plenamente.
8- Destiná un poco de dinero para comprarte algo que te guste (gratificate porque te merecés). Ponerte ropa sexy y moderna si lo deseás, junto con un maquillaje atractivo. Es posible para vos y va a depender de la actitud para llevarlo (ligado a la dimensión autoestima).
9- En lo laboral: si todavía no pudiste desarrollarte, pensá qué cosas hiciste bien y qué no, para corregir y plantearte un cambio.
10- Comprometete a tener un espacio propio (aunque sea chico) de recreación, con una tarea que te guste.
Licenciada Beatriz Bergman, directora de la Clínica Integral de la Imagen.